23 Abr Embutidos poco convencionales que quizás aún no conoces y no puedes perderte

En el vasto mundo de los embutidos ibéricos, hay mucho más que el típico chorizo que todos conocemos (¡y amamos!). Explorar esta amplia gama de sabores es una aventura culinaria emocionante que puede llevar tus papilas gustativas a lugares completamente nuevos o, al menos, a variantes interesantes. En este artículo, te guiaremos a través de algunos embutidos menos comunes, pero igualmente deliciosos.

La clasificación de los embutidos

Antes de sumergirnos en esas delicias menos conocidas, es importante comprender la diversidad que existe en el mundo de los embutidos. Desde el chorizo hasta el lomo, cada variedad tiene su propio sabor, textura y método de elaboración, que se clasifican en diferentes categorías según su origen y proceso de curación.

A grandes rasgos, una posible clasificación sería según su materia prima principal, es decir, ¿qué se embute? Existen los siguientes tipos:

Embutidos de Carne

Los embutidos de carne son quizás los más consumidos en todo el mundo. Elaborados principalmente con carne magra de cerdo, ternera, aves de corral o una combinación de estas, estos embutidos ofrecen una amplia gama de sabores y texturas. Este sería el caso del chorizo,  el salchichón, el lomo, etc., cada uno con su propio perfil de sabor característico.

Embutidos de Vísceras

Para aquellos dispuestos a aventurarse más allá de lo convencional, estos embutidos, elaborados principalmente con vísceras de cerdo, como el hígado, corazón o riñones, pueden tener un sabor más intenso y una textura más cremosa. Ejemplos notables incluyen el tradicional paté o la sabadeña.

Embutidos de Sangre

Igualmente fascinantes son los embutidos de sangre, que aprovechan este ingrediente para crear sabores ricos y complejos. La morcilla es el ejemplo más emblemático de esta categoría, elaborada con sangre de cerdo cocida y mezclada con especias, arroz o cebolla. La morcilla puede variar en sabor y textura según la región de origen y la receta específica.

Los embutidos de carne menos frecuentes y sus características

Ahora, pasemos a explorar algunos embutidos menos conocidos que merecen nuestra atención. Entre ellos se encuentran la Velita, la Sarta, el Morcón y el Lomito. En algunos casos, éstos ofrecen sabores únicos, mientras que en otros cambia su formato de presentación, añadiendo una capa extra de profundidad a tu experiencia culinaria.

Chorizo Velita

El Chorizo Velita se destaca principalmente por su peculiar formato más que por diferencias significativas en sabor o proceso de elaboración. Este tipo de embutido es consumido tradicionalmente en varias regiones de España, particularmente en Andalucía y Extremadura. Su distintiva forma alargada y delgada, que evoca una vela, le otorga su nombre característico.

Sarta

Como pasaba con la velita, la característica diferencial de este chorizo es su presentación en forma de herradura, normalmente atado. Su diámetro no es muy grande, de aproximadamente 4 cm.

Morcón

El Morcón es un embutido típico de Extremadura, elaborado con carne de cerdo adobada y embutida en tripa natural. Su picado más  grueso y su sabor profundo lo convierten en una elección atrevida para quienes aprecian los sabores intensos. Si te encanta  el chorizo, serás fan del morcón.

Lomito

Contrario a lo que se suele pensar, el lomo y el lomito no son lo mismo. La principal diferencia entre la caña de lomo y el lomito es que proceden de partes distintas del cerdo. El lomo se extrae, como su nombre indica, del lomo del cerdo que se sitúa bajo las costillas y pegado al espinazo. El lomito, sin embargo, procede de la presa ibérica, un músculo situado entre los omoplatos del cerdo. Debido a sus diferentes procedencias, también difieren en sabor y textura.

El lomo ibérico destaca por su carne más magra, con una cantidad de grasa muy  reducida, lo que le confiere una textura suave, tierna y un sabor delicado. Por el contrario, el lomito ibérico presenta una cantidad de grasa infiltrada considerablemente mayor, otorgándole una intensidad de sabor distintiva y una jugosidad más pronunciada.

Además de sus perfiles de sabor y textura, otra distinción clave entre el lomo ibérico y el lomito ibérico radica en su tamaño. El lomo ibérico tiende a ser más grande.

El lomo ibérico: el embutido más saludables para consumir

Hablando del lomo y el lomito, es importante decir que todas las diferencias de las que hemos hablado también tienen una traducción en cuanto a valores nutricionales. Pese a que los dos son deliciosos y tienen un merecidísimo lugar en tu tabla de embutidos perfecta, la verdad es que el lomo se lleva el laurel en cuanto a sus valores nutricionales.

Aunque son muchos los que preferirían el lomito ibérico por encima del lomo ibérico, también es cierto que ese componente más graso que le aporta una jugosidad sin igual, también hace que el aporte calórico sea considerablemente mayor, como lo son sus grasas saturadas.

Lo que está claro es que el lomo no solo es delicioso, sino que también es una opción más saludable en comparación con otros embutidos. Gracias a su contenido más reducido en grasa, el lomo ibérico es una excelente opción para aquellos que desean disfrutar de la charcutería sin excederse en calorías.

¿Cómo saber si un embutido es de calidad?

Cuando se trata de embutidos, la calidad es fundamental. Para asegurarte de que estás disfrutando de embutidos auténticos y de alta calidad, presta atención a detalles como la procedencia, el proceso de curación y la etiqueta de calidad. Optar por embutidos de fabricantes confiables como Sánchez Alcaraz garantiza una experiencia culinaria excepcional en cada bocado.

También es importante saber diferenciar las distintas clases que nos podemos encontrar según la norma del ibérico y apostar por la bellota. ¡En esta entrada del blog te lo explicamos todo con respecto a la norma del ibérico!

Cómo preparar una tabla de charcutería en casa

Ahora que estás familiarizado con algunos embutidos menos comunes y sabes cómo identificar la calidad, es hora de poner ese conocimiento en práctica. Preparar una tabla de charcutería en casa es una excelente manera de disfrutar de una variedad de sabores y texturas en una sola comida. Combina embutidos, quesos, frutas y frutos secos para crear una experiencia gastronómica inolvidable para ti y tus invitados.

De cualquier manera, te recordamos que tienes esta entrada del blog hablando largo y tendido sobre esta cuestión.

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